Aquilino Ribeiro

13 de septiembre de 1885 (Viseu, Portugal) – 27 de mayo de 1963 (Lisboa, Portugal)

En nuestro hotel boutique de lujo, ubicado en el corazón de Oporto, rendimos homenaje a Aquilino Ribeiro.

En Torel Palace Porto, hemos dedicado a este autor una Suite Junior, equipada con dos camas individuales y vistas a la ciudad. Situada en la segunda planta, la habitación ha sido decorada por la diseñadora Isabel Sá Nogueira, y el retrato del autor es obra del pintor Jorge Curval.

El baño, elegantemente decorado en mármol, pasa casi desapercibido pese a encontrarse en el centro de la habitación, dentro de un imponente cubo totalmente revestido de espejos.

Aquilino Ribeiro - Torel Palace Porto
Aquilino Ribeiro - Torel Palace Porto
Aquilino Ribeiro - Torel Palace Porto
Aquilino Ribeiro - Torel Palace Porto

Acerca de...

Aquilino Gomes Ribeiro fue un escritor portugués considerado uno de los novelistas portugueses más versátiles.

Aquilino Ribeiro - Torel Palace Porto

Algunas de sus obras principales:

El jardín de las tormentas (1913)

Las tierras del diablo (1919)

El romance del zorro (1929)

Cuando aúllan los lobos (1958)

«Cuando empecé a hacerme famoso en el mundo, mis nobles, la vida no era más que otra droga». – Los pequeños gusanos, Aquilino Ribeiro.

Los ámbitos que abarca van desde novelas hasta relatos cortos, pasando por estudios etnográficos e históricos, biografías, literatura infantil y periodismo polémico.

Tras haber sido arrestado y exiliado en varias ocasiones, primero a Francia y luego a Alemania, Aquilino se unió al movimiento republicano. Durante su estancia en París escribió su primer libro, Jardim das Tormentas. Su lema a lo largo de la vida fue: «Llegar a aquellos que nunca se cansan».

En 1956, fue elegido primer presidente de la Asociación de Escritores Portugueses.

En 1963, mientras se preparaba para recibir un homenaje a nivel nacional, falleció de forma repentina. Actualmente, descansa en el Panteón Nacional de Lisboa, un honor concedido por la Asamblea de la República para preservar su memoria. Su epitafio elegido fue: «No podía seguir haciéndolo».

Debido al uso de expresiones populares y términos que hoy en día son poco o nada comunes, el lenguaje de Aquilino se consideraba complejo. Por ello, el Centro de Estudios Aquilinianos creó el Glosario Aquiliniano, con el fin de facilitar la lectura de sus obras.